El relato ambientado en la actualidad tiene como protagonista a Arnau Miró, dueño del hotel Kabalega en Uganda. Arnau Recibe la noticia de que su tía ha fallecido, siendo el único familiar vivo y heredero de una casa de pueblo en el Valle del Boí, en Lleida. Regresa a sus raíces, después de que veinte años antes huyera, dejándolo todo por un episodio trágico que iremos conociendo a lo largo de la historia. Pero sentirá que le valle le quiere otorgar una nueva oportunidad después de haber renegado de sus raíces.
Arnau se enfrentará a los fantasmas de su pasado y descubrirá una serie de extrañas circunstancias alrededor de la muerte de su tía, además de un pergamino que le sumergirá en una aventura peligrosa. Varios personajes comenzarán a interesarse por la casa y el pergamino y serán protagonistas de la segunda parte de la novela. Arnau retomará también la relación con un antiguo amor y descubrirá que “uno no puede acabar jamás con sus fantasmas; o aprende a convivir con ellos, o muere en el intento”. Los dos juntos comenzarán un juego mortal en el que no saben muy bien quiénes son sus contrincantes.
La narración es entretenida, llevándonos por diferentes épocas, incluida la guerra civil española y la historia nos desvela la riqueza del arte románico que inunda el valle y su pasado de fanatismo, intolerancia y secretismo.